Hoy hay más lanchas que barcas
y más boyas amarillas,
las olas más se levantan,
la mar está más movida.
Su espuma lava mis pasos
serenos por la avenida,
el olor del aire es más puro
y más fresca la brisa;
su cantar se lleva mis penas
mientras el sol me acaricia.
¡Qué afortunada me siento
gracias a que la vida me mima!