Amar
sin medida
sin limitaciones
sin callejones sin salida
plena de paciencia y de perdones
en el día a día
en todas mis noches,
sin condiciones.
Amar
hasta lo que duele
contemplando con cariño
cómo la oscuridad se disuelve
resurgiendo en luz blanca
en el centro de mi Ser Mujer
en mi propia alma.
Amar,
también de forma humana
levantando a veces la voz
pero sin rabia;
aupando,
en la medida que puedo,
la Esperanza.
Anna.